Tributos que debe afrontar un ciudadano argentino, según su nivel de ingresos, bienes y consumos
Según el Vademécum Tributario que cada año actualiza el Instituto Argentino de Análisis Fiscal (Iaraf), a mediados de 2024 regían en la Argentina 155 tributos sobre personas humanas y jurídicas, suma de 46 impuestos nacionales, 25 impuestos provinciales y 84 “tasas y contribuciones” municipales.
Una persona en Argentina puede llegar a pagar entre 22 y 48 tributos, según su nivel de ingresos y consumo.
Según el Vademécum Tributario realizado por el Iaraf, los tributos que deben soportar las “personas humanas” (esto es, seres de carne y hueso), según cuáles sean sus ingresos, bienes y consumos, en ciertas circunstancias, se pueden llegar a pagar, de modo directo e indirecto, hasta 48 e incluso 51 tributos diferentes al año.
El estudio del Iaraf consideró tres perfiles diferentes, tratando de englobar los distintos comportamientos de los argentinos. El criterio utilizado es el de la existencia del hecho imponible, entendiéndose por hecho a todo aquello que da lugar a la existencia de un tributo para un determinado nivel de gobierno. A modo de ejemplo, para facilitar la comprensión: la compra de alimentos y bebidas (sin alcohol) da lugar a el cobro por parte de los distintos niveles estatales, de por lo menos 4 tributos, como son el IVA e impuesto al cheque a nivel nacional, IIBB a nivel provincial y TISH a nivel municipal.
Clasificando a las personas según los tipos de consumidores descriptos anteriormente, el
Perfil 1 incluye consumo de alimentos, bebidas alcohólicas, bebidas no alcohólicas, celular, agua, electricidad, gas, internet, servicios de streaming y consumos con tarjeta de crédito.
Sobre cada uno de estos consumos se ha calculado la incidencia de cada uno de los tributos.
El IVA incide en el 100% de los consumos. Impuestos a los ingresos brutos en el 90%. La Tasa municipal sobre seguridad e higiene en el 90%.
Ahora, respecto a la Incidencia de los diferentes tributos que recaen sobre el consumo de los argentinos
Perfil 2, i incluye consumo de alimentos, bebidas alcohólicas, bebidas no alcohólicas, celular, agua, electricidad, gas, internet, servicios de streaming, consumos con tarjeta de crédito, el consumo de cine y recital y la compra de un electrodoméstico.
Sobre cada uno de estos consumos se ha calculado la incidencia de cada uno de los tributos.
El IVA incide en el 100% de los consumos. Impuestos a los ingresos brutos en el 93.75%. La Tasa municipal sobre seguridad e higiene en el 93.75%.
Por último, considerando el
Perfil 3 respecto de la incidencia de los diferentes tributos que recaen sobre el consumo que incluye consumo de alimentos, bebidas alcohólicas, bebidas no alcohólicas, celular, agua, electricidad, gas, internet, servicios de streaming, consumos con tarjeta de crédito, el consumo de cine y recital, la compra de un electrodoméstico, un pasaje de avión (nacional), la reserva de una habitación de hotel, el consumo en restaurantes, un viaje al extranjero y el cambio del auto por un 0km.
Sobre cada uno de estos consumos se ha calculado la incidencia de cada uno de los tributos.
El IVA incide en el 100% de los consumos. Impuestos a los ingresos brutos en el 95%. La Tasa municipal sobre seguridad e higiene en el 95%.
En los tres casos, la persona tiene como ingreso un salario en relación de dependencia, que luego usa para consumir. Para el cálculo de los tributos que afectan al consumo, se consideran todos aquellos que, más allá de que le corresponda el pago al vendedor, por su traslado al precio termina recayendo sobre el consumidor. El ejemplo más común es el del IVA.
En síntesis, los resultados del estudio permiten afirmar que una persona cuyo consumo se identifique con el supuesto para el perfil 3 puede llegar a pagar al menos 48 tributos distintos en el año. Un 56% son de origen nacional, 15% son de origen provincial y el 29% son de origen municipal. En el caso de una persona fumadora, el número de tributos asciende a 51 tributos diferentes.
El único impuesto que afecta a todos los consumos definidos es el Impuesto al Valor Agregado. El segundo lugar es ocupado por el impuesto a los ingresos brutos y por la tasa por inspección, seguridad e higiene (TISH), con un 90%, 93,75% y 95% de incidencia por perfil, respectivamente. Esta situación refleja que esos tres tributos son los que aportan la mayor porción de la recaudación tributaria obtenida del consumo.